Análisis Kirby Air Riders

Nombre: Kirby Air Riders                  Plataforma: Nintendo Switch 2

Género: Carreras                             Distribuidora: Nintendo

Nintendo nos ha sorprendido con los diferentes juegos protagonizados por Kirby desde que llegó en 1992 a Game Boy con Kirby’s Dream Land. Desde hace más de tres décadas, este héroe rosa ha aparecido en títulos de varios géneros con éxito, ganándose el corazón de los fans.

En febrero de 2004, Masahiro Sakurai lanzó junto a Nintendo el juego Kirby Air Ride para GameCube, un título de culto de carreras con aceleración automática, en el que debemos calcular bien cuándo usar el freno para conseguir aceleraciones. Tras varios años sin una nueva entrega, durante el Nintendo Direct de presentación de Nintendo Switch 2 celebrado en abril se anunció Kirby Air Riders, desarrollado por Sora Ltd. y Bandai Namco Studios Inc.

Ahora, varios meses después, por fin tenemos Kirby Air Riders en nuestras manos, con carreras frenéticas, divertidas y muy caóticas, que amplían todo lo que vimos en el título original de GameCube para llevarlo a un nuevo nivel, y todo ello con el sello de Masahiro Sakurai. Si queréis saber qué puede ofrecer este título de Nintendo Switch 2, no dejéis de leer nuestro análisis.

 

GRÁFICOS

 

El apartado gráfico de Kirby Air Riders destaca por un diseño muy colorido y cargado de originalidad, que consigue el aspecto artístico ideal para este juego. Especialmente llamativas son las diferentes escenas cinemáticas, donde el motor gráfico muestra un nivel de detalle y unas animaciones de los personajes realmente increíbles.

El juego, por su parte, ha sido diseñado con gran mimo, ofreciendo circuitos en 3D muy vistosos, de gran tamaño y repletos de enemigos, elementos y variedad de situaciones. Todo ello se mueve, además, a una velocidad de vértigo, por lo que será necesario estar muy atentos para no perdernos nada. También contamos con circuitos con perspectiva cenital, que cambian por completo la experiencia al tratarse de localizaciones más pequeñas pero perfectamente adaptadas para resultar divertidas en competición.

El diseño de los personajes es exactamente lo que cabría esperar: animaciones adorables y la posibilidad de cambiar su color o añadir objetos a nuestro héroe. Los efectos visuales, por su parte, están al nivel esperado y cumplen de manera más que correcta en todo momento.

Todo esto da como resultado un apartado gráfico muy sólido, que se mantiene estable a 60 FPS tanto en modo sobremesa como en portátil. Sí es cierto que se han notado algunas ralentizaciones muy leves en los momentos más frenéticos y en el modo multijugador a pantalla partida. Aun así, es un juego que brilla con luz propia gracias a su apartado visual.

 

SONIDO

 

El apartado sonoro de Kirby Air Riders vuelve a ser uno de los puntos fuertes del juego, gracias a una banda sonora muy variada, que se adapta a cada momento por lo intensa, épica o agradable que puede resultar. Además, nos permite escucharla desde un reproductor integrado en el juego. A esto hay que añadir un narrador en castellano que nos acompaña durante las carreras y nos indica el objeto recogido en la pista, ya que la velocidad es tan elevada que puede resultar difícil saber cuál hemos obtenido. Los efectos de sonido siguen la línea de otras entregas de la franquicia, muy reconocibles para los fans de la saga y perfectamente adaptados a lo que ocurre en pantalla.

 

JUGABILIDAD

 

A nivel jugable, Kirby Air Riders es un juego de carreras arcade muy frenético en el que nuestro héroe Kirby y sus amigos compiten en diferentes modos de juego.

El control es uno de sus rasgos más característicos, ya que se aleja de lo habitual en el género. La nave avanza de forma automática sin necesidad de pulsar ningún botón para acelerar, y usamos el stick izquierdo para movernos, girar y golpear a los enemigos. El botón B sirve para frenar y, gracias a ello, ejecutar el turbo, además de permitirnos derrapar en las curvas y absorber enemigos del escenario. Si al lanzarlos golpeamos a un rival, obtendremos un acelerón adicional. Como buen título de la franquicia, algunos enemigos que absorbamos con el botón B nos otorgarán poderes —espada, cuchillas, hielo, bolas de energía, fuego, rueda, etc.— y, por supuesto, usaremos ese mismo botón para activarlos. Cada ataque tiene una mecánica concreta, por lo que a veces conviene pulsar rápidamente y otras cargar el movimiento.

Este sistema de control nos obliga a tomar decisiones constantes y aporta un frenetismo pocas veces visto en el género, debido a todo lo que ocurre en pantalla en cada instante. Además, los circuitos incluyen zonas de salto, turbos, cañones y bifurcaciones que, combinados con la aceleración automática, exigen máxima concentración para aprovechar cada elemento del recorrido.

El juego cuenta con 18 circuitos muy variados y con un gran diseño, de los cuales la mitad son adaptaciones de Kirby Air Ride para GameCube, con mejoras importantes para situarlos al nivel del resto. En todos ellos podrán competir hasta seis corredores, usando objetos y habilidades.

El plantel de pilotos es muy amplio, y cada personaje cuenta con sus propias características, incluida una habilidad especial con un medidor que se llena al golpear o recibir golpes. Este poder permite lanzar un ataque único muy potente que puede cambiar el rumbo de una carrera. Esto da un toque estratégico añadido y conocer bien las habilidades de cada piloto puede marcar la diferencia. Los personajes se desbloquean completando los desafíos de los distintos modos.

Las diferentes naves también presentan estadísticas y jugabilidad únicas: algunas cargan la aceleración, otras permiten girar para golpear rivales, otras avanzan solo mientras tengan energía, etc. Lo más interesante es que pueden personalizarse gracias al editor del juego, permitiendo cambiar su color, añadir diseños, adhesivos, efectos, sonidos y piezas de decoración.

Nada más comenzar el juego, nuestra recomendación es pasar por el modo Escuela de pilotos, que resulta ideal para aprender a controlar los pilotos y naves, y sobre el control, las técnicas y perfeccionar al máximo nuestra habilidad practicando las técnicas más avanzadas. 

El modo Air Ride es uno de los más frenéticos, permitiendo competir hasta seis pilotos para llegar los primeros a la meta. En este modo cada nave va dejando estrellas en la pista, que aumentan la velocidad al recogerlas, y también las obtenemos al atacar rivales. Incluye Contrarreloj para mejorar tiempos, Libre para hacer la vuelta más rápida y practicar los movimientos, y Partida en línea para competiciones online.

El modo A vista de pájaro es igualmente divertido, aunque presenta una perspectiva cenital y carreras de menor duración. Aquí solo usamos un botón, manteniendo los mismos objetos, con hasta ocho corredores en línea o local (cuatro jugadores y cuatro controlados por la IA). Las pistas tienen curvas más cerradas donde coger el trazado correcto es ideal aprovechando los muros es ideal para ganar las carreras. Este modo también cuenta con Contrarreloj, Libre y Partida en línea.

Los jugadores del Kirby Air Ride original reconocerán el modo Pruebas Urbanas, que regresa en esta entrega. Se trata de un battle royale ubicado en una nueva isla flotante llamada Celesta, donde podemos conducir libremente mientras recolectamos potenciadores para atacar a los rivales y hacernos con sus naves. El objetivo es mantenernos con vida y mejorar nuestro vehículo.

Las pruebas duran cinco minutos en un mismo mapa, con un total de 16 pilotos en modalidad todos contra todos, o en dos equipos de ocho corredores. Comenzamos con una nave básica y rápidamente la cambiaremos por otra encontrada en el escenario o robada a un rival si la nuestra está cerca de su fin. Es un modo muy caótico, donde no solo importa golpear rivales, sino explorar el ecenario para encontrar todos los potenciadores y secretos. Además, hay multitud de minijuegos y eventos como carreras rápidas, destrozar pilares, acabar con jefes, etc. Y al acabar esos 5 minutos, hay una segunda fase donde los pilotos votaran una prueba entre cuatro, para enfrentarse en un estadio y aquí es donde se elige el ganador de la partida, que al repartirse entre cuatro, da hasta cuatro ganadores. Es decir, estamos ante un modo donde lo que importa es divertirse compitiendo no tanto ser el mejor de todos.

El juego incluye también el modo Escapada, un modo campaña para un jugador que presenta una historia a través de un árbol de pruebas. Aquí encontramos desafíos ya presentes en los otros modos, como carreras, contrarreloj, eventos o combates contra jefes finales. En ningún momento perderemos la vida y tendremos que empezar de 0, está centrado en la diversión, así que nos dejará repetir la misión. Durante este modo, potenciaremos nuestra nave con las recompensas obtenidas en las pruebas de cada etapa de la fase, aunque a veces la prueba no se adapta a la nave, por lo que si fallamos podremos cambiarla por otra que tengamos. Se trata de un modo muy frenético según vayamos avanzando e ideal para ver todo lo que ofrece el juego. Y por supuesto, resulta muy rejugable ya que podemos volver a disfrutarlo con otras dificultades o eligiendo otras rutas.    

Por último, el juego no se olvida del multijugador, tanto local a pantalla partida como online. Este último recibe especial atención, permitiendo jugar prácticamente a todo el contenido del juego en línea. Hay partidas clasificatorias o por diversión en los modos Air Ride, A vista de pájaro y Pruebas Urbanas. Si queremos jugar con amigos, podemos entrar en el Aeródromo, una sala de hasta 32 jugadores a modo de hub, donde podemos movernos, interactuar y organizar partidas con diferentes ajustes. Lo más importante es que el rendimiento online es muy correcto, logrando trasladar al juego en línea el mismo frenetismo que se disfruta en local.

 

CONCLUSIÓN

 

Kirby Air Riders se convierte en una de las propuestas de velocidad más frescas y originales del catálogo de Nintendo Switch 2. Recupera la esencia del clásico de GameCube y la expande con nuevas ideas, modos de juego y un ritmo frenético que lo hacen único dentro del género de las carreras arcade.

Su jugabilidad, basada en la aceleración automática y en la combinación constante de decisiones, poderes y técnicas avanzadas, ofrece una profundidad sorprendente sin dejar de ser accesible. Cada modo aporta algo distinto, desde las carreras más tradicionales hasta el caos estratégico de Pruebas Urbanas o la campaña del modo Escapada, logrando un equilibrio perfecto entre variedad y diversión.

A nivel visual y sonoro, el juego brilla con fuerza: gráficos coloridos, animaciones muy cuidadas, circuitos repletos de detalles y una banda sonora vibrante que acompaña a la perfección cada carrera. El amplio número de pilotos, naves y opciones de personalización, junto con un online robusto y bien planteado, garantizan una enorme rejugabilidad y horas de competición tanto en solitario como con amigos.

En definitiva, Kirby Air Riders es un regreso por todo lo alto que combina nostalgia, innovación y pura diversión. Un título imprescindible para los fans de Kirby y para cualquiera que busque un juego de carreras diferente, lleno de personalidad y adrenalina.

NOTA: 8,5