Análisis Born of Bread

Título: Born of Bread                        Plataformas: PS5, Xbox Series X|S, Nintendo Switch, PC

Género: Aventura, Rol por turnos       Distribuidora: Dear Villagers

El pasado diciembre, los chicos de Wild Arts Studios y Dear Villagers lanzaron "Born of Bread", un juego de aventura y rol por turnos con una fuerte inspiración en la saga Paper Mario. No obstante, le han dado un toque personal y exquisito, lleno de deliciosos bollos, animales adorables y situaciones desternillantes. Este videojuego nos ha maravillado, y esperamos que llegue al mayor número de jugadores y se venda como exquisito pan caliente.

 

HISTORIA

 

Hace mucho tiempo, en un reino muy lejano, vivía la Reina Beatrice en su castillo. A la exigente reina le encantaba disfrutar de ricos y exquisitos manjares, contando con uno de los mejores cocineros del mundo, llamado "Papi Panadero".

Un curioso y extraño día, un desconocido mayordomo le comenta a Papi Panadero que la reina le exige prepararle un delicioso platillo de un curioso libro que nunca antes había visto. Al realizar una de las recetas de ese libro, su horno cobra vida y da origen a un "niño" hecho de pan. El cocinero queda maravillado por ese milagro culinario y, sin lugar a dudas, decide ser el papá de ese adorable y dulce niño, lógicamente llamado "Pan".

En ese mismo momento, en otra parte del reino, tres sabios científicos de la reina están investigando unas extrañas ruinas de una antigua civilización llamada Ember. Sin darse cuenta, al llegar a unos sarcófagos, liberan unos temibles y a la vez graciosos y adorables monstruos que llevan encerrados cientos de años, liderados por el pequeño "Bufón".

Cuando la reina descubre que su cocinero real ha dado vida, de alguna manera, a un niño hecho de pan, entra en cólera y le exige explicaciones. Justo entonces, las criaturas liberadas por los tres profesores de la reina irrumpen en el castillo reclamando el trono, argumentando que ese reino es de su propiedad. Acaban lanzando a Papi Panadero y a su hijo Pan por la ventana del castillo.

Con esta curiosa y graciosa situación, comienza "Born of Bread", con nuestros héroes en un bosque cercano al castillo sorprendidos por la irrupción de esas extrañas criaturas y con el "nacimiento" de ese cálido, esponjoso, amable y simpático niño nacido de su horno.

Con este alocado inicio, inicia nuestra aventura en "Born of Bread", un videojuego súper divertido y gracioso, colorido y reconfortante. Deberemos ser los héroes del reino, reuniendo unos cristales de poder que buscan los antiguos habitantes de Ember, al mismo tiempo que intentamos rescatar a Papi Panadero de la cárcel, ya que es encerrado por brujería al crear a un niño hecho de pan.

En nuestra aventura no estaremos solos, ya que encontraremos a Lint, un gracioso tejón que lleva un mes perdido en el bosque, a pesar de que la salida del bosque está literalmente a su lado. También conoceremos al valiente gremio de héroes guerreros y a unas llamas luchadoras de artes marciales, así como a los mapaches de unas minas que están en guerra con los pájaros del bosque por hacer ruido y no dejarles dormir. Torneos de artes marciales y un sinfín de aventuras y desventuras en cinco largos capítulos llenos de cruasanes, guisos, animalitos, mucho humor y combates por turnos serán nuestro menú del día en "Born of Bread".

 

GRAFICOS

 

El apartado visual de Born of Bread es, sin lugar a dudas, uno de los puntos fuertes del videojuego. Creado con el motor Unreal Engine, comúnmente asociado a producciones de alta calidad, aquí se presenta en un videojuego que toma muchas inspiraciones de los míticos "Paper Mario". A pesar de adoptar un estilo escenográfico similar al de un teatrillo de marionetas o recortables, los elementos en pantalla exhiben una claridad, nitidez y resolución excepcionales. Los personajes parecen recortables totalmente planos.

Los menús del juego adoptan la forma de un diario, y cada página está elaborada con un cuidado y detalle preciosos. Todo parece ser recortable, pegatina, e incluso muchos dibujos dan la impresión de haber sido realizados a mano, como si un niño pequeño los hubiera pintado directamente. Todo en el juego emana carisma, buen rollo, humor y "adorabilidad" en cada situación que se presenta en pantalla.

Uno de los puntos más destacados del apartado gráfico es, sin duda, la ternura que transmite todo. La representación de los distintos platos, la bollería, los escenarios que recorremos; todo invita a abrazarlo y apretarlo, generando una sensación de calidez y bienestar.

En cuestión de segundos, te sientes parte de ese pueblo de personajes y, sin darte cuenta, te encuentras inmerso en su aventura. En términos visuales, además del ya mencionado Paper Mario, el estilo artístico del juego también evoca la estética del divertido dibujo animado "Hora de Aventuras", con personajes superexpresivos y caricaturescos, llenos de animalitos, monstruos y criaturas entrañables, simpáticas y adorables.

 

JUGABILIDAD

 

"Born of Bread" es un videojuego de combate por turnos que se inspira completamente en la famosa saga Paper Mario. Mientras exploramos su mundo de fantasía, que parece sacado de un cuento, lucharemos contra criaturas graciosas mediante comandos ya conocidos en otros videojuegos, como "atacar, defender, huir, usar habilidades especiales u objetos".

Para hacer los combates más divertidos y dinámicos, cada habilidad especial puede atacar a uno o varios enemigos. Si queremos infligir más daño y no fallar el golpe, participaremos en un minijuego que, dependiendo de la habilidad o poder, puede implicar mover el analógico, presionar el botón en un cuadro verde en el momento adecuado, o acertar correctamente una secuencia de botones. Además, al pulsar correctamente el daño del golpe, acumularemos puntos de valor necesarios para realizar ataques especiales.

El juego presenta un sinfín de misiones secundarias, variadas y divertidas. Algunas son tan disparatadas como encontrar el periquito perdido de la reina, reunir a un tío y su sobrina que nunca se han visto, o satisfacer los gustos culinarios de un crítico gastronómico, por mencionar solo algunas. Estas misiones son fácilmente identificables gracias a un bocadillo con forma de "maraña" sobre los personajes del juego. Aunque algunas misiones pueden resultar sencillas, la historia que cuentan los personajes y las suculentas recompensas hacen que valga la pena completarlas.

Como un buen juego de rol por turnos, cada combate otorgará experiencia. Esta experiencia se utiliza para mejorar nuestra capacidad de inventario, representada por una mochila cuadriculada que funciona como un "mini Tetris". Para equiparnos con objetos, debemos colocar cada uno en estos recuadros de manera correcta. A medida que avancemos, necesitaremos ampliar la capacidad de la mochila, la bolsa de objetos y el monedero, donde almacenaremos "tréboles", la moneda de cambio en "Born of Bread", necesaria para comprar comida o pagar en las distintas posadas donde descansaremos.

Un coleccionable esencial en el juego son unas salamandras que se camuflan en el entorno, identificables por sus ronquidos y una pompa que sale de su nariz. Al encontrar y canjear estas criaturas a una diosa del bosque, recibiremos puntos de habilidad para mejorar los ataques especiales de nuestros compañeros de aventuras.

Todas las mecánicas de juego en "Born of Bread" están interconectadas e implementadas de manera que se comprendan rápidamente y de forma natural, proporcionando una experiencia de juego realmente divertida, entretenida y deliciosa.

 

SONIDO

 

En cuanto al apartado sonoro, por desgracia, no contamos con voces de ningún tipo; es un juego al estilo antiguo, similar a otros grandes juegos del género, donde los personajes emiten una especie de "sonido" al hablar. Un ejemplo reconocido mundialmente sería algo similar a los personajes de "Animal Crossing". Dado que estamos hablando de un juego indie con un presupuesto ajustado, podría haber sido mucho pedir un doblaje. Sin embargo, la verdad es que no se echa en falta, ya que la traducción al castellano es soberbia. Han tenido muy en cuenta la cantidad de bromas, chistes, gags y chascarrillos al realizar la conversión a nuestro idioma.

En cuanto a la composición musical, el videojuego cuenta con muchos temas, todos alegres, divertidos y variados entre sí, que dan vida a cada situación. Ya sea en un bosque, en un castillo, en una aldea o en un torneo de artes marciales, siempre hay una melodía para cada situación. Todas ellas son magníficas, y no podemos olvidar la melodía de combate, que cambia según el escenario en el que nos encontremos en ese momento. Fácilmente se quedarán en nuestra cabeza, y acabaremos tarareándolas sin darnos cuenta.

En cuanto a los efectos de sonido, el videojuego realiza un gran trabajo. Cualquier cosa que veamos en pantalla está representada con su sonido, ya sea el golpear del cucharón en un barril o pasar las páginas de nuestro diario. Como hemos comentado antes, las "voces entre comillas" de los personajes, que son "ruiditos", y todo lo que vemos en pantalla tiene su efecto de sonido para representar la situación. Por lo tanto, no tenemos nada negativo que añadir al apartado sonoro de "Born of Bread".

 

CONCLUSION

 

Born of Bread ha sido, sin lugar a dudas, una de las sorpresas más inesperadas del pasado diciembre. Este juego, totalmente eclipsado por las grandes superproducciones, merece, sin duda alguna y por méritos propios, darse a conocer. El cuidado que los desarrolladores han puesto al crear este videojuego es incuestionable. Es una obra llena de amor, pasión y cariño que el jugador puede sentir desde el primer momento que inicia su partida. Un juego al que siempre apetece volver, ya sea por sus personajes, su humor, sus escenarios o la variedad de situaciones que presenta. En nuestro caso, no hemos podido dejar de jugar hasta completarlo, lo cual nos llevará en torno a las 20 o 30 horas, e incluso más si deseamos desbloquear todos sus secretos, sorpresas, misiones secundarias y coleccionables.

Con un precio de 29,95 € en consolas o 19,95 € en PC, "Born of Bread" es un título que vale cada céntimo. Ofrece mucho más de lo que cuesta, ya que la alegría, el buen rollo y el humor que transmite superan con creces esa pequeña cantidad de dinero. Es un juego que merece ser conocido, y esperamos que el boca a boca haga justicia y llegue a la mayor cantidad de jugadores posible.

En todos sus apartados, Born of Bread roza casi el sobresaliente, a excepción de algunos pequeños bugs de menor importancia aquí y allá. Deseamos que alcance al mayor público posible, ya que es el mejor pan que hemos probado en años, y lo puedes disfrutar con gluten o sin gluten. Esto no es una broma; el juego literalmente cuenta con una casilla para activar esta opción. ¿Qué más se le puede pedir?

Nota 8,5