ANALISIS: AGONY

Título: Agony                                              Plataformas: PlayStation 4, Xbox One, PC Steam

Género: Survival Horror                              Distribuidora: Koch Media

Hace escasos dos años, gracias a la nueva moda del crowdfunding en el que, jovenes y talentosos desarrolladores con talento pero sin el apoyo de una gran empresa detrás podían sacar adelante (en el caso de los videojuegos) sus emprendedores y arriesgados proyectos gracias a la donación de gente desinteresada que no les cuesta vaciar sus carteras para que dichos juegos vean la luz, fue presentado en la web de KickStarter un nuevo survival horror que prometía ser una experiencia nueva, original y aterradora que nunca antes habíamos podido ver en la industria.

La propuesta de PlayWay y Manmind Studios cautivó a casi 4000 patrocinadores que consiguieron alcanzar no sólo la totalidad del presupuesto que requerían poder sacar el proyecto adelante, sino que duplicaba con sus donaciones al dinero demandado. Con un apartado artístico muy llamativo, Agony se dejaba querer con su primer trailer en donde podiamos ver que la acción de la trama se ubica en las mismísimas profundidades del infierno...un infierno claramente inspirado en famosos escritos como la Divina Comedia de Dante en donde no sólo se nos presenta un inframundo plagado de demonios y sufrimiento, sino que esta recreación era capaz de trastocar la mente del espectador con imagenes realmente explícitas a un nivel técnico muy vistoso.

Tras dos años de desarrollo, Agony finalmente ya se encuentra disponible en tiendas acompañado de un buen puñado de polémicas con respecto a su acabado final y con la censura final a la que se ha visto obligada la desarrolladora para poder poner  la venta el título.

 

 

HISTORIA

La historia de Agony es simple y sirve como mera excusa para adentrarnos en la terrorífica aventura que nos encontraremos durante los 4 episodios que componen la campaña principal. Tras uun video introductorio donde presenciamos nuestra caida a los infiernos, seremos un alma en pena que vaga por el inframundo poseyendo cuerpos errantes que deambulan entre sollozos y lamentos por las áridas y sanguinolentas tierras de belcebú.

Tras investigar diferentes anotaciones de otros infieles caidos ya caidos en desgracia, descubriremos que existe una pequeña posibilidad de escapar de la muerte si somos capaces de escondernos de los "diabólicos peligros" que nos acechan tras cada esquina. Nuestra misión final será encontrar a la Dama Roja, la única que conoce la salida de los avernos y que pese a su naturaleza, deberemos confiar si queremos tener una mínima posibilidad de volver al mundo de los vivos.

Durante el desarrollo del juego, encontraremos multitud de notas y de personajes que nos irán sumergiendo más en la historia de la Dama Roja, además de contarnos las miserias y las crueles atrocidades que los demonios acometen sobre los pecadores (las cuales viviremos y sufriremos tanto en primera como en tercera persona). Estos elementos, aunque resultan ser elementos y detalles que aportan poco a la trama principal, si ayuda en sobremanera en conseguir transmitir la sensación de deseperación, miego y agonía (como bien indica el título del juego) que la enferma mente de los desarrolladores han sabido plasmar de una manera original, cruenta y acertada pese a las limitaciones en el desarrollo que comentaremos a continuación en otros apartados de esta review.

 

GRAFICOS

Uno de los causantes del éxito y de la expectación suscitada por el título durante su campaña de KickStarter, Agony mostraba un título cuyo apartado técnico, pese al relativo escaso presupuesto que requería su desarrollo, resultaba muy realista y verdaderamente sobrecogedor. Agony hace uso del polémico motor Unreal 4...polémico en el sentido de que, si no conoces bien a fondo los entresijos y los "trucos" para sacarle el mayor partido al motor gráfico puedes crear maravillas técnicas como, por citar un ejemplo, Batman Arkham Knight. Por desgracia, Unreal 4 en manos inexpertas puede dar como resultado un juego vistoso técnicamente pero que requiere de una potencia bruta muy superior a las consolas actuales para poder funcionar correctamente.

Al inicio del título, el motor gráfico luce de manera espectacular, generando unos escenarios detallados con unos efectos de luz y shaders sobrecogedores que sí reflejan lo que pudimos ver en el video de presentación de KickStarter...pero a medida que avanzamos en la historia, vemos como la calidad desciende de manera considerable, llegando a ser en ocasiones escandalosamente baja para las consolas de actual (y anterior) generación.

A nivel artístico Agony muestra potencial en las primeras horas de juego, con escenarios que simulan un acúmulo de vísceras y carne sanguinolenta que generan realmente miedo y repulsa pero, más adelante, la calidad de las texturas y de los modelados se simplifica en exceso, generando ambientes poco cuidados que difieren mucho de la genial ambientación que podemos ver al inicio del juego.

Este bajón en el apartado gráfico puede apreciarse claramente en los diferentes personajes (ya sean cuerpos errantes o las diferentes criaturas demoníacas del infierno) y criaturas del título. Dichos modelados poseen una calidad insuficiente para cualquier juego que se precie hoy día, denotando el origen humilde y ambicioso del título que, si bien cuenta con ideas y planteamientos en su diseño iniciales que son interesnates, no saben exprimir quizá por falta de experiencia o desconocimiento de cómo sacar partido a Unreal 4.

Esa inexperiencia se nota a la perfección durante las numerosas bajadas de frames que experimentaremos durante la partida, cayendo el rendimiento muy por debajo de los 30 fps mínimos que se exigen en esta generación, consiguiendo entrbiar considerablemente la experiencia en según qué momentos de persecución en donde deberemos correr como alma que lleva el diablo de una muerte casi segura.

Ante sde escribir estas lineas, debemos ser honestos y decir que recientemente el título ha recibido una gran actualización que solventaba numerosos bugs por un mal diseño de los escenarios (el personaje se quedaba pillado o durante un puzle, nos quedábamos atrapados sin posibilidad de resolver el mismo de manera exitosa, etc). Del mismo modo que esos bugs han disminuido drasticamente (al menos a nosotros no nos ha vuelto a ocurrir ningun bug por culpa del diseño artítstico de juego) el rendimiento del juego, aunque mejorado, necesita pulirse ante los momentos de mayor carga poligonal y de efectos de luz.

 

JUGABILIDAD

Agony nos ofrece diferentes propuestas y posibilidades en su gameplay que resultan interesantes pero que en ocasiones no están bien ejecutadas. Para empezar, cabe destacar que el juego se centra principalmente en la resolución de puzles, algunos más acertados que otros, y en la infiltración haciendo uso del sigilo para no ser detectado por las diferentes criaturas que acabarán con nosotros sin dudarlo en cuanto nos escuchen o nos vean. Para eludirlas, deberemos caminar agachados entre las sombras, escondernos entre pilas de cadáveres mutilados y putrefactos o utilizar elementos del entorno como lagos de sangre y vete a saber qué otros fluidos corporales presentes en algunas de las secciones del mapeado. Además, contaremos con la posibilidad de aguantar la respiración para que no nos detecten cuando se encuentran cerca de nosotros y estemos escondidos en el más absoluto silencio.

Estas ideas, ya presentes alguna de ellas en otros títulos del género actuales, podrían encajar y funcionar a la perfección si no llega a ser porque la IA de los demonios es excesivamente limitada. En ocasiones, el sigilo o la estrategia queda en un segundo plano, siendo la opción más inteligente correr por patas como si no hubiera un mañana.

Los escenarios son laberínticos y en su mayoría están bien realizados en su estructura, siendo un punto fuerte de los mismos la cantidad de información escondida en forma de notas que nos desbloquean extras o nos sumergen más en la historia. También durante la exploración, podremos encontrar una serie de frutos que nos darán puntos de habilidad para mejorar alguna de nuestras cualidades (un mayor sigilo para que los demonios no nos detecten tan facilmente, una mayor fortaleza ante ataques débiles...). Estos atributos mejorables están completamente desaprovechados, ya que como mencionamos antes, el sigilo es practicamente algo que está en el papel pero que no se ejecuta como debería pr la escasa inteligencia artificial. Del mismo modo, aumentar nuestra resistencia a ataques resulta absurdo cuando siempre, subamos el nivel al que subamos dicho atributo, moriremos "de un sólo toque".

Otro aspecto de la jugabilidad reside en la capacidad (como buen alma en pena) de poseer diferentes cuerpos una vez que "nos maten". Antes de morir definitivamente, cuando somos detectados o eliminan a nuestro "contenedor humano" podremos desplazarnos durante un tiempo limitado para buscar otra marioneta de carne a la que poder poseer para continuar la partida. A medida que avance la trama iremos adquiriendo un mayor control sobre la posesión, pudiendo llegar a controlar a los diferentes tipos de demonios durante un tiempo limitado para hacer uso de sus poderes sobrenaturales para solventar algunos puzles o abrirnos camino ante obstáculos.

En nuestra forma humana, no dispondremos de armas para poder defendernos mas allá de una serie de antorchas con las que poder iluminar las profundidades del infierno o para quemar obstáculos de madera y ramas que bloquean un camino seguro o una cámara secreta con alguna estatua coleccionable que se encuentran repartidas y muy bien escondidas por los escenarios.

Por último, cabe destacar que la paranoica y esquizofrénica representación del infierno nos permitirá en ocasiones trepear por las paredes, llegando incluso a revertir la escena por completo mientras perdemos la perspectiva al caminar por lo que antes era el techo.  Esta capacidad puede parecer un detalle sin importancia pero dado el momento, cuando más perdimos nos encontramos, sólo fomenta en mayoría de las ocasiones un agobio añadido al ya de por sí asfixiante y estresante título (por la buena ambientación que podremos encontrar en algunas secciones).

La exploracion será importante para encontrar los diferentes puntos de salvado repartidos por el infierno. El juego no cuenta con una dificultad desmesurada pero no serán pocas las veces que muramos intentando resolver un puzle a contrarreloj mientras nos amenaza una horda de demonios con intenciones poco amigables...por lo que interesa encontrar los puntos de control especialmente en las zonas más complejas. También encontraremos una serie de símbolos y pinturas realizadas con sangre que memorizaremos una a una para, más adelante, desbloquear una puerta pintando uno de los dibujos o sellos que hemos visto anteriormente. Para ello deberemos tener ojo avizor y no perder de vista los elementos del entorno que pueden darnos alguna pista sobre qué símbolo (de los muchos que podemos lelgar a entrontar) es el correcto.

Pos último, y pese a la buena ambientación que podremos encontrarnos a cuentagotas durante la aventura, el juego como survival horror nos deja con un mal sabor de boca ya que nos mantiene tensos durante la partida, pero nunca llegamos a vivir ningun momento de tensión extrema...tanto por la ausencia de "screamers" como por una inteligencia artificial poco cuidada.

Como bien decimos, Agony cuenta con propuestas muy interesantes en su conjunto que, de estar mejor trabajadas y pulidas lo convertirían en un survival horror que, sin ser constante en su ambientación, nos dejaría unos buenos sustos para el recuerdo...por desgracia esto no ocurre a no ser que no tengas experiencia en juegos del género.

 

SONIDO

En este apartado poco podemos reseñar. Sin duda, un apartado tan importante como este para un survival horror no debe fallar ya que el sonido ambiente e incluso la música nos pueden atrapar por completo y ser los mayores artífices de nuestras taquicardias. Aunque en el apartado musica, las composiciones brillan por su ausencia, Agony si cuenta con una buena ejecución de los efectos de sonido para crear tensión y dramatismo (sin ser tampoco excesivamente brillantes).

El título nos llega localizado al castellano con unos subtítulos quizás excesivamente pequeños al que el tipo de fuente no ayuda a una correcta comprensión de buenas a primeras hasta que nos amoldemos al estilo de letra. Las voces, que no son muy numerosas pero haberlas las hay, nos llegan en inglés y con una interpretación in tanto mejorable (especialmente si nos referimos a los NPC).

 

CONCLUSION

Agony es un proyecto ambicioso que cuenta en lineas generales con un buen montón de ideas y una representación del infierno digna de tener en cuenta, pero bajo nuestra humilde opinión peca de ser un título demasiado ambicioso donde queda patente que no sólo hace falta una buena idea para lograr el éxito...sino que también necesitas los medios y el conocimiento para llevarlos a cabo y que funcionen a la perfección en el producto final.

Es cierto que incluso con las primeras actualizaciones, el título ha contado con una cantidad de bugs considerables pero a día de hoy, con el último parche lanzado (1.03) Agony corre de manera mucho más fluida, con menos bajadas de frames y sin bugs (al menos nosotros no hemos vuelto a sufrir ninguno desde entonces).

A nivel técnico Agony comienza de manera sublime pero a medida que nos adentramos en las profundidades del infierno el nivel de calidad, tanto artística como técnica, pega un bajón considerable, dándonos la sensación de que estamos ante un título que aun tiene mucho trabajo por delante.

Y pese a todo esto, Agony cuenta con un factor importante...y es que pese a sus fallos y sus carencias, el juego engancha y entretiene lo suficiente como para tenerlo en cuenta si es un género que no has profundizado en el por temor a pasar un mal rato...en este aspecto Agony lo consigue, sí...pero no brilla.

 

NOTA: 6