Análisis Metal Gear Rising: Revengeance

Título: Metal Gear Rising: Revengeance                   Plataforma: XBox 360, PlayStation 3

Genero: Hack´n´slash                                          Distribbuidor: Konami

A estas alturas no debe quedar nadie que no conozca la saga Metal Gear. Desde su primera aparición para MSX, la obra de Hideo Kojima introdujo el sigilo en los videojuegos, creando así un género nuevo prácticamente desde la nada. Eso amén de deleitarnos con unas historias magníficas, envolventes y sólidas en todas sus entregas, narradas de una forma que ya desearían para sí muchísimas de las superproducciones de Hollywood. La saga de Kojima es, en definitiva, una de las mayores y más emblemáticas joyas del mundo de los videojuegos. 

   Pues bien, ahora nos llega la última entrega de la saga en forma de un spin-off con Raiden al frente, y lo hace trayendo un soplo de aire fresco a la saga de espionaje táctico. Y es que en esta ocasión Raiden deja de lado el espionaje y la cautela para lanzarse de frente a cercenar miembros por doquier en un trepidante hack´n´slash. ¿Y consigue Raiden mantener el nivel de las demás aventuras de Snake a golpe de katana?. Pues bien, vamos a comprobarlo. Ésto es Metal Gear Rising: Revengeance.

 

HISTORIA

Han pasado varios años desde que cayó la organización de los Sons of the Patriots. Con sus planes frustrados la expansión de la guerra como negocio ha decaído. Muchos paises han empezado su camino hacia la pacificación, hasta en zonas en las que los conflictos están tan arraigados como África u Oriente Medio. Además, para suplir este freno en la militarización de los paises ha surgido un gran crecimiento en la aparición y expansión de las CMP, compañías militares privadas.

   Es en una de estas compañías donde encontramos a Rayden. Con su cuerpo mejorado gracias a la floreciente tecnología cyborg, Rayden entró a trabajar en Maverick, una CMP especializada en la seguridad y en la protección de zonas en estado de pacificación. 

   Es durante una de estas misiones en las que comenzará la historia. Durante un traslado rutinario de N´Mani, el presidente de un floreciente pais africano, el convoy de Maverick es atacado por un grupo de asalto de soldados cyborgs. Rayden se enfrenta a ellos armado con su espada de alta frecuencia, capaz de cortar a un nivel cuántico con lo que no hay nada que se resista a su filo. Sn embargo es incapaz de enfrentarse a los líderes enemigos. N´Mani es asesinado y Rayden acaba mutilado y medio muerto, viendo cómo sus asesinos ecapan sin poder detenerlos.

   A partir de entonces Rayden se dedica a investigar las operaciones de Desperado Enforcement, la compañía militar tras el ataque, para tratar de averiguar e impedir sus planes en varios luegares del mundo, desde Méjico a Pakistan.

   La historia de este Revengeance está a la altura de cualquier otra entrega de la saga. Una historia sólida y profunda, mucho más teniendo en cuenta que este es un título mucho más centrado en la acción que los demás Metal Gear, por lo que se corría el riesgo de que se rebajase el nivel. Incluso, y como viene siendo normal en la saga de Kojima, la historia toca temas profundos y filosóficos, como por ejemplo el libre albedrío de las personas y hasta que punto viene determinado por los genes y por los valores tanto buenos como malos que la propia sociedad trata de perpetuar, o la lucha interna de Rayden entre el hecho de luchar por la justicia y la defensa de la gente y el verse obligado a, literalmente, partir en dos a unos enemigos que no siempre son todo lo culpables que le gustaría.

   Otro punto fuerte de la historia es la forma en que se cuenta. Principalmente narrada a través de unas escenas cinemáticas realmente mpresionantes, cada una de estas escenas está dirigida de una forma totalmente cinematográfica. En ocasiones nos parecerá estar viendo una película llena de acción del primer al último fotograma, con la boca abierta ante lo que tenemos ante nuestros ojos. Sin embargo las escenas no suelen ser lo suficientemente largas como para caer en una de las principales críticas que siempre han acompañado al reto de títulos de la saga: la sensación de pasar más tiempo como espectador que como jugador.

   En cuanto a las charlas de codec, el otro aspecto que compone la crítica antes mencionada, Rising tampoco cae en esto. Las conversaciones por codec suelen ser bastante cortas también y las tendremos desde la misma pantalla del juego, sin necesidad de pasar a su interfaz propio. Suelen ser informes de la ruta a seguir conforme vamos abriéndonos niestro sangriento camino. También podremos abrir el codec y llamar a nuestros contactos, por supuesto, pero esto es opcional por lo que tampoco nos crea la falsa sensación de estar ante uina película interactiva en lugar de ante un juego.

 

GRÁFICOS

Metal Gear Rising: Revengeance es un auténtico despliegue visual. El diseño de los personajes es tan cuidado y detallista como nos tienen acostumbrados los títulos de Kojima-san. Esto es especialmente claro en los personajes y enemigos principales, aunque también podremos verlo en todos los demás enemigos que tendremos ocasión de mutilar con nuestra hoja. Si bien los enemigos pueden ser un pelín repetitivos, eso no quita que su diseño y su aspecto haga gala del mimo habitual. Y como ya hemos mencionado, el aspecto tanto de Raiden como de los demás enemgos, Sundowner, Jetstream Sam o los capitanes de Desperado, los Vientos de Destrucción, es verdaderamente bueno, con gran detalle y un trabajo de texturización muy bueno.

   El diseño del mapeado también está a un gran nivel, tanto en su disposición como en su nivel de detalle. Los escenarios están plagados de objetos y cosas que podremos trocear a voluntad y que muestran también el mimo y el esfuerzo que la gente de Platinum Games ha puesto en ellos. No todo es perfecto, sn embargo, ya que si eliminamos todos los objetos destruíbles el escenario en sí tiene unas texturas algo más simples y con una tonalidad general algo monótona. No es que las texturas sean malas, ojo, simplemente que comparadas con el resto de las texturas en personajes y objetos son algo menos elaboradas. No obstante esto no es del todo malo, ya que gracias a eso Raiden se mueve a 60 frames por segundo, con un frame rate estable en todo momento sin que importe lo que haya en pantalla, sin ralentizaciones y sin fallos apreciables.

   También hay que alabar el resto de efectos visuales y lumínicos como son los destellos en el choque de espadas o cuando nuestros rivales preparan sus ataques, por poner algunos ejemplos. La calidad de estos efectos es muy grande y además contribuyen a dar más espectacularidad si cabe al juego.

 

SONIDO

Sonoramente Rising mantiene el gran nivel que mantiene en los demás aspectos. Oiremos temas musicales más clásicos y de una calidad magnífica, con el estilo de las otras entregas de la saga. Sin embargo también escucharemos muchos temas más modernos, tanto rockeros como de música electrónica. Estos temas también son muy buenos y acompañan a la acción y a la danza de nuestra espada de una forma inmejorable.

   El resto de efectos sonoros, espadazos, explosiones, los chirridos metálicos de las máquinas enemigas, etcétera, también cumplen su papel de una forma más que digna, sin poder echarle nada en cara en este punto.

   Por último, el trabajo de doblaje es de una calidad evidente. Salvo un par de frases que puedan sonar claramente recitadas y sin mucho acierto en cuanto a lo emotivo, que además pertenecen a personajes secundarios y puntuales de la historia, el doblaje de Rising raya en una calidad pasmosa. Las frases están dichas con la emoción precisa y en su nivel requerido en cada momento, con unas voces que se ajustan muy bien a cada personaje. La única pega que podemos señalar es que el trabajo vocal no está localizado a nuestro idioma, teniendo que escucharlo en la lengua de Shakespeare.

   En cuanto a la traducción a nuestro idioma sí podemos señalar un par de taras. En algunas ocasiones la traducción es quizá demasiado literal, lo que hace que a veces las frases que leamos no terminen de cuadrarnos del todo, aunque esto es algo muy puntual y no nos impedirá en ningún momento el seguir la historia sin problema alguno. También hay que señalar que en la descripción de uno de los movimientos de Raiden, así como en la traducción de un par de frases durante las primeras misiones del juego, se cuelan los textos en alemán. Sin embargo esto solo se produce únicamente en los casos señalados, así que no pasará de ser algo anecdótico. Por tanto, y a pesar de unos pequeños, pequeñísimos fallos no tendremos ningún motivo real de queja con la traducción.

 

JUGABILIDAD

La jugabilidad es lo que de verdad nos interesa de esta nueva aventura de Raiden. En esta ocasión nuestro protagonista deja de lado la infiltración táctica tan típica de Snake y que ya emulase en Metal Gear Solid 2, para centrarse en repartir espadazos a diestro y siniestro como si no hubiese un mañana. Revengeance se centra en una acción ininterrumpida como sólo Platinum, padres de Bayonetta por ejemplo, puede hacer.

   El control de este cañero Raiden es muy sencillo a la vez que eficiente. Nos moveremos con uno de los sticks mientras que con el otro controlamos la cámara, algo bastante típico pero de una eficacia más que probada. Con uno de los gatillos podremos correr por el escenario, amén de eludir los obstaculos de forma automática y vistosa. A la hora de las luchas, presentes en todo este título como no podía ser de otra forma, dispondremos de un botón de ataque normal y otro de ataque fuerte, con los cuales podremos realizar toda una plétora de combinaciones distintas y a cada cual más destructiva y espectacular. Esto también cambiará en caso de ir equipados sólo con nuestra katana de alta frecuencia o de llevar también un arma secundaria, que podremos ir adquiriendo tras derrotar a los distintos jefes. Además también podremos optar por equiparnos con armas secundarias como lanzacohetes o distintos tipos de granadas que, si bien no son fundamentales, sí que nos podrán ser de ayuda en muchas situaciones.

   En cuanto a los combates Raiden basa su técnica en parar y contraatacar a los enemigos para después desmembrarlos con una lluvia de cortes. De hecho será incapaz de rodar o de cualquier otro movimiento de esquiva, por lo que deberemos acostumbrarnos a bloquear los ataques que nos dirijan. Para ello deberemos estar atentos a nuestro enemigo, ya que antes de atacarnos podremos ver un destello rojo, que nos indicará cuando debemos ponernos en guardia, o amarillo, que nos indica que el siguiente golpe no podremos pararlo y tendremos que intentar alejarnos y evitarlo de alguna manera. Esquivar estos golpes es algo bastante difícil, todo sea dicho, y deberemos conocer las rutinas de nuestro enemigo y estar muy atento si queremos tener una mínima posibilidad de evitar el daño.

   Lo más característico de Revengeance es sin duda la capacidad de cortar todo lo que nos crucemos a nuestro antojo. Ya en sus primeras apariciones, este proyecto se situaba bajo el eslogan "Cut at will", "Corta a tu antojo" traducido a la lengua de Cervantes. El juego ha mantenido esta máxima incluso tras pasar a las hábiles manos de Platinum, por lo que esta capacidad de trocearlo todo es uno de los pilares de su jugabilidad. Las secuencias de golpes y combinaciones posibles nos servirán para debilitar a los enemigos y dejarlos a merced de nuestra espada. Una vez que hayamos traspasado sus defensas, lo cual sabremos con un brillo azulado en la zona expuesta de nuestro rival, podremos activar el modo Katana con uno de nuestros gatillos. Una vez activado Raiden se mantendrá fijo donde esté y se preparará para dar rienda suelta a su capacidad de carnicero cibernético. Con los dos botones de ataque podremos dar un tajo horizontal o vertical, además de usar la opción de dirigir el tajo exactamente donde queramos con el stick derecho. Durante este modo podremos literalmente despedazar a nuestros enemigos, con lo que podremos aniquilarlos de una forma espectacular o limitar su potencia destructiva al ir privándolos de sus extremidades.

   Esto también será fundamental para Raiden por otra razón, ya que será la principal forma a su alcance para recuperarse de las heridas. Y es que el cuerpo cibernético con que le obsequió Doktor, experto en la tecnología cyborg y mecánico personal de Raiden, no tiene capacidad de recuperación en aras de obtener más potencia. La única forma de poder recuperarse es acceder a las sustancias regenerativas que poseen los cuerpos de los cyborgs y las máquinas no tripuladas enemigas, localizados principalmente en sus médulas espinales. Por tanto para poder curarse tendremos que recurrir a la técnica del Zandatsu, que consiste en cortar a nuestros enemigos en dos para poder robarles estos órganos cargados con sustancias recuperadoras. Esto es fundamental para el juego, ya que las raciones que recogeremos pueden llegar a ser insuficientes, sobre todo en niveles de dificultad superiores y contra los jefe finales, amén de dar lugar a formas realmente espectaculares de acabar con nuestros enemigos.

   En ocasiones también encontraremos enemigos de rangos superiores a los que podremos cortar la mano izquierda, lugar donde los cyborg almacenan sus datos. Esto nos permitirá acceder a mejoras nuevas por parte de Doktor, ansioso por acceder a cuantos datos pueda para avanzar con sus investigaciones, además de servirnos como coleccionables. Y es que Rising tiene un montón de coleccionables con los que tentarnos, con bastante éxito además, a jugarlo una y otra vez. De esta forma compensa la duración de su historia, de apenas unas cuatro o cinco horas y que puede hacerse algo corta. Dispondremos de tres niveles de dificultad desde el principio más un cuarto si competamos los tres iniciales. Además podremos ir encontrando ordenadores con información de Desperado con los que desbloquear misiones de entrenamiento de Realidad Virtual. E incluso la forma en que se divide en distintos tramos las misiones también ayuda a ésto. Estos tramos van marcando nuestro avance por el nivel y al acabar cada uno recibiremos una puntuación según nuestra velocidad y principalmente de nuestro rendimiento en combate. Con estos puntos iremos desbloqueando las habilidades, trajes y las armas secundarias de Raiden y sus mejoras, por lo que muchas veces  nos encontraremos repitiendo una zona para tratar de mejorar nuestra puntuación y lograr desbloquear un golpe o mejorar un aspecto de nuestra espada.

    Con todo esto ya os podemos asegurar que Metal Gear Rising: Revengeance es un título con una jugabilidad impresionante y que hará que nos cueste soltar los mandos una vez que nos pongamos tras ellos. Sin embargo no todo puede se perfecto en la vida y hay un par de aspectos menos positivos que, si bien palidecen en contraste con sus virtudes, también es necesario señalar. El primero es su escasa duración, sólo unas cinco horas, aunque como ya hemos señalado se atenúa bastante con numerosas opciones para rejugarlo. El segundo y el más importante de sus fallos es sin duda la cámara. Y es que durante los combates será una molestia en muchas más ocasiones de las que sería deseable o incluso disculpable. Tiene una tendencia a mantenerse detrás de Raiden con una constancia y una virulencia excesivas, con lo que si la movemos para tratar de obtener un ángulo mejor con el que ver qué nos preparan los cuatro enemigos que nos rodean, la cámara puede volver a su estado inicial ella sola, sin aviso y de forma bastante brusca. Por tanto podremos recibir más de uno, dos o veinte golpes por no ser capaces de ver de dónde nos llegan los ataques. Además la cámara se ve obstaculizada por las paredes, por lo que su capacidad de colocarse dónde y cuando quiere para nuestro perjucio y enfado se ve muy potenciada a menos que nos veamos con un espacio amplio a nuestro alrededor.

   Sin embargo hay que reconocer sin ambages que la suma de sus virtudes tapa por completo a sus defectos, y por mucho que la cámara nos moleste y nos haga maldecir en más ocasiones de las que nos gustaría, Revengeance nos hará pasar un rato muy entretenido y apasionante, disfrutando de una acción intensa y realmente magnífica.   

 

CONCLUSIONES

 

Metal Gear Rising: Revengeance era, cuanto menos, un proyecto arriesgado. Para coger una saga de tanta solera e historia como Metal Gear y alejarla tanto de la fórmula original, aún cuando sea con un spin-off, hay que estar dispuestos a asumir un riesgo y la opción de cosechar un grandísimo éxito o un estrepitoso fracaso, sin término medio. Pues bien, viendo el resultado no podemos sino alegrarnos de que Hideo Kojima y la gente de Platinum Games hayan sido tan valientes. Revengeance es un título de acción de lo mejor que hay en su género, con una acción trepidante y absorvente que no nos dejará soltar los mandos durante mucho rato y con un guión más cuidado de lo normal para un "simple" hack´n´slash, como no podía ser de otra forma contando con el sello de Metal Gear. Cierto, con una duración de 4 o 5 horas en su modo historia puede resultarnos algo corto, aunque es algo que palía bastante al tener montones de cosas que coleccionar, títulos que desbloquear y mejoras que adquirir. Y también es cierto que la cámara nos resultará molesta en muchas ocasiones. Sin embargo nada de esto llegará a empañar la experiencia que supone el periplo esgrimístico de Raiden. La gente de Platinum Games ha demostrado una vez más por qué están en la cima de este género y Revengeance es sin duda uno de los mejores títulos que podremos encontrar si lo que queremos es acción pura y dura.

 

NOTA: 8,7

Bariel
Imagen de Bariel
Buen ejemplar

Este es un juego del que no esperaba mucho, me ví la demo y la verdad que mis impresiones fueron muy positivas, tanto que algún día me lo pillaré xD

[url=http://www.yourgamercards.net/profile/Bariel_Breina][img]http://www.yourgamercards.net/trophy/a/Bariel_Breina.png[/img][/url]<
Manji_Rocks
Imagen de Manji_Rocks
Que ganas de tenerlo, la demo

Que ganas de tenerlo, la demo me encanto y la verdad que platinum games es de mis estudios prefes me suele gustar todo lo que sacan

Juan Manuel Ibá...
A por él... no te "cortes"...

Éste es uno de esos juegos "must have"... Impresionante en todos los sentidos. 

1luismi1
Imagen de 1luismi1
Bonito sucedaneo hasta que

Bonito sucedaneo hasta que salga el verdadero Metal Gear, buen sistema de combos y contra-ataques