ANALISIS: JUST CAUSE 4

Título: Just Cause 4                                             Plataformas: PlayStation 4, Xbox One, PC

Género: Acción                                                    Distribuidora: Bandai Namco

Tres años hemos tenido que esperar para ver de nuevo unas de las sagas más explosivas y salvajes que habitan en el mundo de los videojuegos, así es, estamos hablando de Just Cause. El grupo sueco Avalanche Studios no quiere abandonar la senda del éxito obtenido gracias a la ultima entrega de la franquicia y por ello hoy nos presenta, Just Cause 4: Otro sandbox dónde volveremos a revivir las peripecias de Rico Rodríguez, con la intención de mejorar los puntos fuertes de su predecesor y eliminar al mismo tiempo sus deficiencias. Veamos si lo han conseguido pero antes una pregunta, ¿Estáis preparados para prenderle fuego al mundo?

 

HISTORIA

Tras los acontecimientos ocurridios en Just Cause 3, el agente Rico Rodriguez viaja a la isla ficticia de Solís. Un territorio tropical que evoca a las costas de centroamérica que se encuentra reprimido por un grupo armado encabezado por nuestra antagonista en esta entrega: Gabriela Morales.

Con la represión de La Mano Negra, los lugareños de Solís, ven amenazada sus vidas y la de sus familias ante la opresión de la orden. Es por eso que, con la llegada de Rico, el cual va tras las pistas que le conyevarán a descubrir el paradero de su padre, comienza una rebelión en la que, haciendo uso de nuestras capacidades, iremos ganando terreno poco a poco a los opresores para devolver así el territorio al pueblo de Solís.

Por primera vez, Just Cause 4 quiere profundizar en su trama, añadiendo elementos y motivaciones a Rico que nos sirvan como jugadores a coocer parte de su hasta ahora casi desconocido pasado y el de sus familiares. Aunque puede sonar interesante a primera vista, a las pocas horas de juego podemos denotar que el argumento es una mera excusa para ponernos en una situación, quedando la historia relegada a un segundo plano y siendo la acción, las explsiones y la adrenalina el plato fuerte del título.

 

GRAFICOS

Avalanche ha querido dar un paso adelante en el apartado técnico de la saga utilizando un nuevo motor gráfico llamado Apex Egine. Si bien es cierto que en comparación a su predecesor Just Cause 4 luce impresionante, denotamos que, en el caso de la versión de PS4, y tras un parche "obligatorio" para sacar el máximo partido  al apartado visual del título sin experimentar bugs como hasta hace pocos días, el título cuenta con claros oscuros en este apartado.

La inmensidad de Solís, cuyo territorio abarca más de 1000Km cuenta con un genial nivel de detalle gracias a la densidad de la vegetación y lo bien representada que se encuentra la selva y las diferentes ubicaciiones disponibles en el título. El punto flaco que encontramos en un escenarrio muy detallado y cargado de polígonos reside en las deficientes texturas que podemos encontrar en según qué objetos y en el excesivo efecto de popping que podemos experimentar durante la secciones de vuelo. La distancia de dibujado en PlayStation 4 (tanto en su versión Pro como en la versión estandar), dista mucho de lo que podemos observar en las versiones de PC o Xbox, las cuales ganan por goleada si enfrentamos unas versiones con la que hemos podido probar para realizar la review.

La resolución en la versión de Playstation 4 no hace justicia a las posibilidades demostradas de la versión vitaminada de la sobremesa de Sony, viendose los escenarios cargados de borrosidad y falta de definición. Por otro lado, las sombras dejan también bastante que desear, lejos de lo que pudimos ver en los primeros gameplays en las ferias donde el título estuvo presente. Pero no es malo en el apartado técnico en Just Cause 4 (en su versión para PS4)...el título cuenta con elementos muy bien implementados como los efectos de luz y climatológicos además de los detalles de las explosiones y (como no) las geniales físicas como detallaremos a continuación.

Just Cause 4 presta gran atención al detalle. Por ejemplo cuando estemos entre las arenas de cualquier playa notaremos el traje sucio de polvo y tierra, así como notaremos la humedad en el cuero de nuestras ropas al salir del agua. Otro detalle acuático será el efecto de oleaje en las playas y costas de las islas, un detalle que no todos los juegos tienen. Los efectos de luz también están a la altura del resto del acabado visual. Mención especial cae para los efectos luminosos derivados de las explosiones, parte indispensable del juego, también rayan a un buen nivel. Así, veremos un montón de chispas, más que correctamente logradas, al atacar un generador eléctrico. O el fuego que sale del motor de un helicóptero que esté en nuestro punto de mira, con la lógica deflagración subsiguiente. Y ya que estamos con las explosiones, la gestión de físicas de Just Cause 4 está a un gran nivel. Será un verdadero placer el ver cómo la chimenea industrial de un complejo militar, con una pequeña ayuda nuestra en la forma de dos granadas , comienza a inclinarse lentamente, se parte poco a poco y acaba convertida en un montón de escombros que caerán como una lluvia pétrea. O cuando al volar un depósito de combustible veremos caer trozos calcinados de metal a veinte o treinta metros de distancia. Y todo esto de una forma bastante convincente.

Si hay algo que ha mojorado en Just Cause 4 con respecto a su antecesor son los modelados de los personajes y los vehículos. Los personajes del juego están bien acabados, cierto, pero la calidad que tienen no llega (cuando hablamos de personajes secundarios durante las cinemáticas conversacionales) de cuidado y mimo que el del resto del mundo que nos rodea. Los modelos de los vehículos, por otra parte, serán insuficientes para el centenar, más o menos, que podremos controlar.

Por último, cabe destacar que pese a algunas carencias, el título cumple sobradamente las espectativas, con opciones de mejora con futuros paches en la versión de PS4 que mejoren el aspecto visual. El rendimiento por el contrario es perfecto en esta versión. En las decenas de horas jugadas, sólo hemos experimentado en ocasiones muy puntuales alguna bajada en la tasa de frames...y eso que hemos exprimido al máximo las posibilidades de la consola generando situaciones de auténtico caos cargadas de deflagraciones.

 

JUAGABILIDAD

Just Cause 4 basa principalmente su jugabilidad, en destruir casi cualquier cosa que se nos ponga por delante. Y ya está. Sin molestarnos en seguir una historia compleja ni devanarnos los sesos en complicadísimas estrategias para tratar de vencer a enemigos imposibles. Nuestra misión es traer el caos a la región de Solís. Dicho así suena terriblemente simple, con posibilidades de hacerse repetitivo y hasta aburrido, y puede que en algunos casos lo sea. Pero no es más cierto que, Just Cause 4 nos mantendrá mucho tiempo delante de nuestras pantallas, disfrutando de una orgía de destrucción. Y es que admitámoslo, ¿quién no ha deseado arrasar con todo lo que nos rodea en nuestra vida diaria? Pues eso es lo que podemos hacer en esta isla caribeña.

En cada uno de los cientos de emplazamientos que nos encontraremos en Solís habrá una cantidad de elementos propiedad del tiránico gobierno. Ya sean generadores eléctricos, silos de munición, depósitos de gas o combustible, transformadores o generadores eléctricos, chimeneas industriales, grúas...

Cada vez que destruimos algo, encontramos una mejora o completamos misiones o emplazamientos, recibiremos unas bonificaciones. Dichas bonificaciones nos servirán para ir desbloqueando nuevas misiones, misiones simples para nuestros rebeldes aliados o nuevos elementos para adquirir en el mercado negro (que se moverá por las islas en helicóptero, lo que nos permitirá llamarlo y abastecernos dondequiera que estemos. Además cuando nos enfrentamos a las tropas de la Mano Negra o destruyamos algo, subirá una barra de caos que nos permitirá ir desbloqueando nuevo territorio a nuestro ejército rebelde dentro del extenso mapeado.

Entre las armas (que podremos disparar solo una o una en cada mano) tendremos una pistola automática, un revólver de mayor calibre y un subfusil. Para el arma grande podremos elegir entre un rifle de asalto, una ametralladora pesada, un par de escopetas (recortada y de asalto), un lanzagranadas y un lanzacohetes. Además, en esta nueva entrega encontraremos un numero mucho más considerable de armas que podremos arrebatar de las manos inertes de nuestros enemigos o podremos encontrar en los diferentes depositos de armas esparcidos por las instalaciones de la Mano Negra.

Un elemento importante del juego es el gancho de anclaje. Con una longitud de unos cien metros, este gancho es capaz de adherirse a cualquier superficie. Y bien usado nos servirá para prácticamente cualquier cosa. Obviamente, podremos usarlo para escalar edificios, incluso montañas. Pero también podremos darle muchos usos en combate.

Gracias al gancho podremos tirar de las torres de vigilancia a esos molestos francotiradores, tirar al suelo a un enemigo que nos esté disparando, colgar a un soldado de una farola cercana y rematarlo mientras se balancea intentando soltarse. Podremos enganchar a un enemigo a nuestro vehículo y arrancar arrastrándolo tras nosotros. Además también nos servirá para acercarnos a un vehículo y apoderarnos de él, algo terriblemente útil cuando estemos bajo la mira de un helicóptero de combate. Además, y como novedad, se han añadido nuevas mejoras al gancho, (como la posibilidad de tracción o la posibilidad de colocar unos pequeños impulsores que manden por los aires a todo aquello que enganchemos...como veis las posibilidades son muy numerosas pero en las propias miisones estas posiblidades se encuentran un tanto desaprovechadas.

También dispondremos de un paracaídas que nos permitirá, evitar las molestias derivadas de una muerte provocada por una caída de decenas de metros de altura. Además podremos usar el gancho en combinación con el paracaídas, con lo que nos impulsaremos mientras planeamos en un efecto tirachinas. Esto nos permitirá viajar largas distancias, algo muy útil en las ocasiones en que queramos huir a toda prisa de un enfrentamiento o tengamos que recorrer un buen trecho de selva de un lugar a otro.

Por otro lado, tendremos la posibilidad de realizar diversas carreras y misiones ecundarias de vuelo haciendo uso de nuestro traje aéreo que evoca a unas "alas de ardilla" para descansar de tanta destrucción. En estas carreras tendremos que pasar por una serie de puntos de control en el tiempo indicado. Las habrá con vehículos terrestres, vehículos aéreos o incluso que requerían que nos lancemos al vacío sin ninguna clase de vehículo. Y gracias a esto será como avanzaremos en el juego.

El título nos durará apenas unas 15 horas si nos dedicamos exclusivamente a seguir con la historia. Bastante poco, la verdad. Pero, sinceramente, para jugarlo de esa manera mejor ni jugarlo. Just Cause 4 está pensado para explorar, buscar cuantos emplazamientos para destruir podamos, realizar misiones (básicamente para tener alguna excusa para destrozar algo) y para dirigirnos allí donde pensemos que se necesita algo de caos. Bien jugado nos durará mucho, pero que mucho más.

 

SONIDO

El apartado sonoro de Just Cause 4 cumple su labor de forma correcta, poco más. Ojo, no es que sea malo, es sólo que no pasa de eso. La música nos acompañará de fondo todo el tiempo. Habrá diversos temas dependiendo de la situación, más tranquilos cuando vayamos sobrevolandola zona  con nuestro paracaídas o más frenética en mitad de un tiroteo. Sin embargo la música acompaña de tal manera que apenas notaremos su presencia. No molesta ni se hace repetitiva, cosa muy de agradecer, pero tampoco llama la atención lo más mínimo.

En cuanto a los efectos sonoros hay que decir que, sin llegar a destacar demasiado, están bastante bien conseguidos. El ruido de los motores de los vehículos que podremos pilotar, el sonido de las balas y las explosiones a nuestro alrededor, el sonido de las estatuas al ser derribadas... todo ello está bastante bien recreado y nos ayudará a meternos de lleno en la acción. Por último, señalar que Just Cause 4 está totalmente doblado al castellano. Algunas voces no acaban de cuadrar con el personaje, la verdad.

 

CONCLUSION

Rico Rodríguez está de vuelta, mostrando todas sus virtudes y algún que otro defecto, pero sin engañar a nadie. Avalanche Studios nos propone desde el minuto uno, una aventura llena de acción, diversión y libertad absoluta en forma de más 1000 km2 de isla abierta. Es cierto que no contiene una trama sorprendente y puede que algún aspecto técnico sea mejorable, pero Just Cause 4 atesora más argumentos a favor que en su contra.

Just Cause 4 sigue apostando por la fórmula de siempre, y es que… ¿Para qué cambiar algo si funciona? Si te gustan los juegos con una acción frenética, ininterrumpida y sembrar el caos allí por dónde pisas, este será el juego perfecto para amenizar tus navidades.

 

NOTA: 7.5