Análisis Sonic Boom: El Cristal Roto

Título: Sonic Boom - El Cristal Roto                 Plataforma: Nintendo 3DS

Género: Plataformas                                     Distribuidora: Nintendo

Después del genial Sonic Lost World, ambos disponibles en exclusiva para las consolas de Nintendo de la actual generación, el erizo más famoso de los videojuegos estaba haciendose derrogar para aparecer en un nuevo título, el cual, no ha carecido de polémica tanto por el rediseño de los personajes de la saga como por la (por desgracia) mal acabada versión para Wii U.

Sonic Boom: El Cristal Roto, nombre que recibe la entrega de este nuevo Spin-off basado en la nueva serie de televisión de Cartoon Network del mismo nombre, se aleja por completo de su malogrado hermano mayor lanzado en la sobremesa de Nintendo. La edición de portátil, desarrollada por un estudio diferente al extinto Big Red Button (encargado del desarrollo en la versión de Wii U), cumple con las espectativas del jugador clásico de manera mucho más satisfactoria pese a las novedades y a las carencias de este reboot frente a los títulos clásicos...gracias a dios.

HISTORIA

Hace 5000 años se libró una batalla entre el bien y el mal por el poder de un poderoso cristal. Lyric, una maquiavélica serpiente, ansiaba conquistar el poder divino que un poderoso cristal otorgaba a aquel que lo obtuviese. Los Ancianos que custodiaban tal poderoso objeto lograron confinar a Lyric en una prisión de cristal de la que jamás podría ser liberado. Conscientes además del peligro del poder del cristal, los Ancianos decidieron dividir en fragmentos dicho poder para que nadie fuera capaz de encontrarlo y poner así al mundo en peligro. Milenios después, el poder de los Ancianos que confinaba al infame reptil se debilitó, provocando que Lyric consiguiese escapar. Obsesionado con conseguir su objetivo de dominar el mundo como ser más poderoso del mismo, creó un ejercito de robots para comenzar la búsquedade los fragmentos.

Amy, conocedora de esta leyenda por antiguos jeroglíficos, embauca a Sonic, Tails, Knuckes y la alocada y esperpéntica Sticks en la búsqueda de los fragmentos del Cristal para poder estudiarlo con detalle. En una de las antiguas ruinas de los ancianos, Amy se ve asaltada por Lyric, el cual, sabe que nuestra rosada amiga es una pieza importante dentro del puzle para agilizar la búsqueda del Cristal.

Con Amy secuestrada y con Lyric acechando el planeta, Sonic y sus amigos no dudarán en luchar codo con codo contra las amenazas que sobre ellos se ciernen haciendo uso de sus nuevas habilidades para acabar con Lyric y su ejercito de robots y salvar así su amiga y al mundo.

GRAFICOS

En Sonic Boom: El Cristal Roto, el apartado técnico luce a un nivel mayor del que ya pudimos disfrutar en Sonic Lost World para Nintendo 3DS. Al contrario que la anterior entrega, Sonic Boom: El Cristal Roto es un juego desarrollado casi en su totalidad en un entorno en dos dimensiones como los aclamados Sonics clásicos de antaño, donde, a diferencia de los añorados títulos de nuestra amada Sega MegaDrive, el diseño de los escenarios fomentan una exploración más pausada para encontrar los numerosos fragmentos de mapas y de cristales como más adelante comentaremos.

La calidad de detalle de los escenarios es correcta, siendo en las primeras fases visualmente hermosas y cargadas de detalles para, al final del juego, carecer de la viveza y la complejidad de diseño que podemos encontrar en casi la totalidad del título. Durante las escasas fáses en tercera persona, donde se respeta la cámara de los Sonics más modernos, los escenarios y texturas son realmente pobres...muy posiblemente para evitar alguna bajada de frames que pueda arruinar la frenética experiencia de juego dado a la velocidad a la que corre el erizo y a los elementos que no dejan de moverse a gran velocidad en la pantalla de nuestra amada portatil.

El diseño de personajes, quitando a Knuckles que es verdaderamente tosco, no se hace tan llamativo ni chirria a los ojos del más puritano de los fans como puede ocurrir en la versión de Wii U, siendo los diseños similares a lo que ya pudimos ver en los dos episodios de Sonic 4. Por el contrario, los enemigos cambian su diseño del más puro estilo dibujo animado para convertirse en robots de una estética más seria y elaborada. El apartado técnico luce especialmente bien en el mapa de selección de fase. Cargado de detalles y de coloridas texturas. Además, el mapa está completamente vivo con la cantidad de elementos secundarios u efectos ambientales en el entorno en movimiento.

A nivel técnico es el Sonic más elaborado y cuidado casi en su totalidad hasta la fecha pese a la disminución notable de calidad de los últimos niveles. Por desgracia, en lo que este Sonic Boom: El Cristal Roto sale perdiendo con diferencia con sus antecesores en Nintendo 3DS es sin duda alguna en el efecto 3D. Exceptuando algunos momentos muy puntuales, el efecto 3D resulta casi imperceptible. Una auténtica pena no haber jugado más con las cualidades que Nintendo 3DS nos proporciona con unos entornos tan coloridos y detallistas.

Otra ausencia que queda patente frente a su antecesor título es la ausencia de cinemáticas que, sin contar la única cinemática de gran calidad existente en el título al comenzar la partida, hubieran beneficiado mucho al acabado general del juego.

JUGABILIDAD

Pese a que este Spin-off ha querido ser un cambio drástico a la ya mítica jugabilidad de los Sonics clásicos y modernos, podemos aun encontrar en Sonic Boom: El Cristal Roto varios elementos comunes que, sin ser exprimidos como a muchos fans nos hubiese gustado, aportan un estilo de juego diferente sin alejarse mucho (al contrario que ocurre en El Ascenso de Lyric) de la esencia de esta mítica saga.

En Sonic Boom: El Cristal Roto, la exploración prima por encima de todo en entornos laberínticos plagados de objetos coleccionables que nos proporcionarán útiles ayudas para orientarnos gracias al mapa que podremos visualizar en la pantalla táctil. A medida que vayamos obteniendo fragmentos de planos escondidos en los niveles, podremos desbloquear ayudas en el Laboratorio de Tails para localizar más fácilmente los objetos escondidos en cada uno de los niveles para completar el juego al 100%. De entre dichos objetos, tendremos que localizar también 6 fragmentos de mapas y 5 fragmentos de cristal, los cuales, al conseguir todos los items de cada fase, nos proporcionará una insignia muy útil para poder desbloquear los mundos y fases siguientes. Como extra por conseguir todos los objetos coleccionables obtendremos monedas que podremos utilizar para conseguir figuritas desbloqueables de todos los personajes y enemigos del juego. Un extra que sin ser vital, será un reto completar por los desafíos que Sega nos plantea en cada una de las fases donde, deberemos finalizar cada una de ellas con un numero determinado de Rings o finalizar la misma en un tiempo record haciendo uso de las habilidades y atajos escondidos en cada nivel.

Si hay algo que sin duda destaca en Sonic Boom: El Cristal Roto es sin duda alguna las múltiples y diferentes habilidades (comues y propias) de cada uno de los personajes. Una vez que hemos conseguido desbloquear a nuestros cuatro compañeros de aventura podremos jugar con ellos en todo momento intercambiando los personajes con la cruceta digital de Nintendo 3DS.

Correr, realizar un doble salto y un ataque aereo directo hacia el enemigo son las habiidades comunes de todos los personajes jugables. En cambio, cada uno posee habilidades especiales que nos resultarán de gran ayuda para completar el juego en su totalidad, siendo la clave el combinar todas ellas durante cada fase. Mientras que Sonic puede realizar un poderoso golpe en forma de misil para destruir bloques azules que nos bloquean el camino o acceder a zonas demasiado altas para ser alcanzadas por ningun otro personaje, Tails podrá lanzar bombas a los enemigos para aniquilarlos desde la distancia o utilizar sus dos colas para volar y planear por las corrientes de aire que encontraremos durante la aventura.

Knuckles, el fortachón y musculitos del grupo, podrá atacar asestando mamporros a los enemigos, además de poder excavar zonas de tierra determinadas para acceder a zonas secretas crgadas de items y Rings. Por último, tenemos a la nueva incorporación al equipo: Sticks. Esta alocada y paranoica a la par de desternillante nueva compañera, tiene la habilidad de poder lanzar y dirigir su boomerang. Con el, seremos capaces de acceder a sitios inaccesibles para poder activar interruptores que nos abriran nuevas secciones y rutas a explorar. Además, gracias al mismo, podremos conseguir Rings e items con tan sólo tocarlos.

Otra novedad importante que existe en Sonic Boom es la incorporación del Rayo Energético. Gracias a dicho rayo, podremos eliminar escudos de protección que poseen algunos enemigos, los cuales, con él, serían completamente invulnerables a nuestros ataques. Además, usaremos el rayo energético para poder agarrarnos cual Indiana Jones con su lático a plataformas determinadas.

Como se puede observar a simple vista, Sonic Boom: El Cristal Oscuro es un experimento más que una continuación de la clásica jugabilidad de los Sonic clásicos donde, prima la exploración pausada al corre corre en ocasiones sin sentido. Anque tenemos la opción y hay secciones de loopings y piruetas, sello de ideantidad del personaje, no es ni por asomo lo que prima e importa en este apartado. Dicho cambio, aunque está bien llevado, no parece haber contentado a la prensa del mundillo. Muy al contrario que el resto de medios, creemos que, con sus carencias o pecando un poco en la repetitividad de la mecánica de juego, el cambio y la renovación de la jugabilidad en un título de la franquicia era fundamental y necesario en una saga que arrastra desde hace años el peso de no innovar ni arriesgar lo más mínimo en la evolución de su mecánica de juego.

La importancia de la exploración y la capacidad de alternar los diferentes personajes para hacer uso de sus exclusivas habilidades son sin duda el punto más fuerte y atractivo del juego que, pese a que puedan resultar duranteel desarrollo del mismo ligeramente repetitivo, es un buen comienzo para orientar en futuros juegos cómo explotar las bondades y las novedades jugables que este Sonic aporta a la franquicia.

Además de la importantísima utiliad del mapa de la pantalla inferior, el uso de la pantalla táctil de Nintendo 3DS es por desgracia casi inexistente...usandola tan sólo para lanzara nuestro personaje hacia los diferentes mundos a modo de tirachinas.

SONIDO

Si hay algo que todo luego de Sonic posee, casi como un sello de la marca, es una banda sonora sublime, cargada de temas metaleros y sintonías de gran calidad que dan vida e identida propia a todos los títulos del erizo. En Sonic Boom: El Cristal Roto...ya sea porque es un videojuego basado en una nueva serie de televisión infantil, o porque han querido también experimentar con un cambio drástico enel apartado sonoro, la música cañera y superpegadiza que caracteriza a cada uno de los juegos de la saga brilla completamente por su ausencia. Temas sencillos, que no destacan especialmente en ningun aspecto ni son especialmente memorables no acompañan en un título que, pese a que innova y rompe con la norma del estilo clásico de Sonic, podría haber "cantado menos" si la BSO estuviera acorde al resto de títulos pasados.

Dentro del apartado si hay que hacer una mención especial al doblaje que, pese a que sólo quedan patentes las voces al castellano durante la cinemática del primer juego, han buscado al reparto de Sonic habitual desde la serie de Televisión de Sonic X y Sonic Generations. Pese al esfuerzo, si es cierto que podrían haber añadido diálogos a la version de 3DS del mismo modo que la edición de Wii U.

CONCLUSION

Sonic Boom: El Crital Roto es un spin-off que pretende innovar dentro de la estancada franquicia del erizo. Sabiendo esto, y si sois fans de los juegos clásicos, hay que tener en cuenta que la velocidad, al contrario que títulos pasados, queda en un segundo plano para dar más importancia a la exploración de los mapas, la recolección de items y Rings y al uso de las multiples, diferentes y bien aplicadas habilidades que poseen este peculiar grupo de heroes.

Las fáses, aunque bien diseñadas a nivel técnico, pueden resultar repetitivas por la mecánica de juego pese a ser escenarios grandes cargados de secretos a encontrar. Pese a que prima la exploración, el factor velocidad que hizo famoso al erizo aun persiste aunque en menor medida, creando una fusión que otorga un nuevo estilo de juego muy interesante para aquellos que no estén familiarizados con los juegos de Sonic o con los más pequeños de la casa.

Este cambio de perspectiva en el apartado jugable del título, aunque a nosotros nos ha gustado, es un arma de doble filo, con sus pros y sus contras para aquellos que son experimentados jugadores. A dicho usuario, Sonic Boom: El Cristal Roto les parecerá un  título atractivo en el apartado técnico y novedoso por la genial incorporación de las habilidades de cada uno de los personajes jugables, pero no supondrá un reto especialmente dificil a superar dada la facilidad del juego y a su escasa duración inicial in completar todoslos objetos coleccionables (entorno a 6-7 horas).

Con sus pros y sus contras, la versión de Sonic Boom para Nintendo 3DS promete al jugador unas pocas horas de diversión y humor, quizás un poco más infantil dado el origen televisivo de este título, que con una fluida y perfecta ejecución del control, es infinitamente superior en todos sus aspectos a la edición de la consola de sobremesa de Nintendo.

NOTA: 7