Análisis: Resident Evil 3

Título: Resident Evil 3                                 Plataformas: PlayStation 4, Xbox One, PC Steam

Género: Survival Horror, Acción                    Ditribuidora: Koch Media

El género del Survival Horror ha sufrido una evolución más que evidente de los últimos años hasta ahora, cambiando por completo las mecánicas de juego y buscando el susto fácil a base de "screamers" como las películas de terror adolescentes de los años 80. Fue tal la moda en las mecánicas de primera persona que incluso la saga que dio a conocer al género y franquicia fetiche de Capcom (Resident Evil) decidió apostar por las nuevas modas dando un cambio radical a la saga con Resident Evil 7.

El pasado año, Capcom dio un golpe sobre la mesa para silenciar a aquellos que se quejaron de las nuevas mecánicas en primera persona del título mencionado anteriormente, rescatando y reimaginando a la vaca sagrada de la saga obteniendo así la candidatura a uno de los mejores juegos del año con Resident Evil 2 Remake. Tras las buenas sensaciones generadas entre el público mayoritario, era de esperar que la desarrolladora japonesa aprovechase el tirón de éxito y ventas y anunciara la reinvención de otro de sus títulos insignia por aquella época de los 32 bits: Resident Evil 3.

Con tan solo un año de desarrollo, Capcom rescata otro de sus títulos icónicos a pocos metros de la meta de la actual generación de consolas, aportando grandes cambios con respecto al título original y potenciando más en esta ocasión los momentos de acción y exploración con algunas nuevas inclusiones y ausencias con respecto al título original otorgándonos casi un título nuevo ya no solo por el cambio radical en sus mecánicas de juego y en su apartado gráfico sino también en su trama y desarrollo de la misma.

 

HISTORIA

Para ponernos un poco en situación, cabe mencionar que la trama de Resident Evil 3 sucede pocos meses después de los acontecimientos ocurridos en la primera entrega de la saga. La ciudad de Racoon City se ve asolada por la plaga del Virus-T: Un arma biológica creada en secreto por la Corporación Umbrella cuyo resultado desencadena que toda la ciudad (o la mayor parte de sus habitantes) se conviertan en muertos vivientes sedientos de sangre.

Tras los acontecimientos vividos en la Mansión Arklay (Resident Evil 1) la exmiembro del Servicio de Tácticas Especiales y Rescate (S.T.A.R.S) tras ver como sus advertencias acerca del la relación del T-Virus y su relación con la Corporación Umbrella eran desoídas y presenciar como el virus zombificante ha llegado a Racoon City, decide intentar huir de la ciudad. En su intento, aparece Némesis, un nuevo proyecto desarrollado en secreto por Umbrella cuya única finalidad es silenciar a todos los Miembros de S.T.A.R.S. que alertaron de la situación real del virus y su vínculo con la organización.

En su intento de huida, en donde en esta reinvención del título original se ha añadido una maravillosa introducción del personaje de Jill en su apartamento, nuestra protagonista conoce a Carlos Oliveira, un miembro del Servicio de Contramedidas de Riesgo Biológico de Umbrella (U.B.C.S.). Este, junto a otros miembros de mercenarios pertenecientes a dicha organización intentan salvar al mayor número posible de personas para después, salir en la búsqueda del Dr. Nathaniel Bard, un científico de Umbrella que en contra de los deseos de la Organización, es la única persona del mundo conocedor de la existencia de una vacuna contra el T-Virus.

Bajo esta finalidad, Jill Valentine decide unirse a Carlos pese a la persecución constante de Némesis para encontrar a dicho médico y restaurar la normalidad de una ciudad sumida en el caos gracias a la milagrosa vacuna que puede acabar con la pandemia que se cierne sobre el mundo.

Para la narrativa de la trama, Capcom ha sabido añadir la ya característica narrativa de corte cinematográfico, viéndose obligada a añadir algunas secuencias y cinemáticas que añaden un mayor trasfondo y peso a la historia, consiguiendo transmitir mucha más acción y terror que en el título original aparecido originalmente en PSX (lógicamente, la tecnología de las consolas ofrecían una gran limitación para poder otorgarnos secuencias dinámicas y cinematográficas).

Para otorgarle una mayor espectacularidad, Capcom se ha permitido ciertas licencias a la hora de rescatar este clásico de antaño, eliminando ciertas secciones míticas de la saga e incluyendo otras quizá menos sustanciales pero q otorgan una mayor sensación de inmersión y oscuridad al título. Esto sin duda, para los más puristas, resulta algo inexplicable si a ello le sumamos otros cambios en la jugabilidad que puede no gustar al publico fan de la franquicia y cuyas ausencias detallaremos más adelante.

 

GRAFICOS

Como no podía ser de otra forma, el apartado más destacable de Resident Evil 3 Remake es sin duda su renovado apartado técnico el cual, no sólo adapta al título a los cánones actuales de los videojuegos de la actual generación, sino que dicha reinterpretación, ha supuesto un cambio radical en la jugabilidad del título con respecto al clásico de PSX.

Capcom ha reutilizado el mismo motor gráfico empleado tanto en Resident Evil 7 como en Resident Evil 2 (RE Engine) que tan buenos resultados dieron en títulos pasados y consiguiendo con ello recrear una atmósfera lúgubre, oscura y asfixiante que luce de manera magistral en la nueva y remodeladas calles de Racoon City.

Y es que gracias al giro de tuerca en este apartado técnico, quedan atrás en este remake las imágenes prerenderizadas y estáticas de antaño que se reutilizaron para traer de vuelta el remake de Resident Evil 1 , para dar el salto a los entornos en tres dimensiones y a una cámara trasera al hombro como los Resident Evil de pasadas generaciones desde que la cuarta entrega aparecida originalmente en Game Cube y como ya hicieron en el sobresaliente Resident Evil 2.

Con el cambio de los modelados de los escenarios a las tres dimensiones, Capcom ha tenido que modificar ciertos aspectos del entorno para crear una mayor sensación de amplitud entre las esquinas y largos pasillos de los diferentes escenarios del juego, agrandando así considerablemente algunos escenarios y aportando algunos nuevos no presentes en el juego original.

Dichos escenarios están cuidados al máximo, poseyendo detalles a un nivel incluso mejor de lo que pudimos ver en la comisaría del anterior remake gracias en parte a que aunque revisitemos escenarios ya modelados para Resident Evil 2, gran parte del juego lo recorreremos por las húmedas y peligrosas calles de la ciudad. Un buen efecto de las texturas y en especial, la excelente ambientación con los diferentes efectos visuales de luces y sombras, generan ese ambiente continuo de inseguridad, que nos hará temer cruzar cada esquina ante el temor de qué criatura o peligro se esconde tras la sombra.

Los personajes también han sufrido una evolución que queda demostrada de manera sobresaliente en las cinemáticas de conversaciones con otros personajes o en la propia introducción del juego. Las facciones son hiperrealistas y salvo alguna contada ocasión, el título nos deja con la boca abierta numerosas veces por la fluidez y realismo de los movimientos y expresiones faciales.

El trabajo realizado en este apartado, aunque arriesgado, es sin duda el revulsivo más importante junto a la nueva jugabilidad adaptada de este clásico de los 90 para atraer a los nuevos jugadores y dar a conocer así a un incunable de la historia de los videojuegos. De igual manera, esta reimaginación supone un aliciente más que goloso para que los fans de la saga se reencuentren con uno de los juegos más aclamados de la franquicia pese a los importantes cambios que encontramos frente al original.

Al igual que ya ocurría con el anterior remake, Resident Evil 3 cuenta con un buen puñado de escenarios que serán reconocibles a primera vista pero como hemos comentado atrás, ciertos lugares míticos del juego original no han sido adaptados en esta nueva versión, desapareciendo por completo. Por el contrario, Capcom si ha añadido nuevos escenarios (no especialmente largos) que, si bien encajan bien con la historia (la sección del hospital está muy bien llevada y alargada dentro de la trama) dan la sensación de estar poco trabajados.

Del mismo modo que en el original, viajaremos una vez más a la comisaría de Racoon City por lo que como es de esperar, se reutiliza al completo todos los modelados de Resident Evil 2 tal y como los pudimos ver el año pasado en su correspondiente título.

Otro elemento fundamental (que incluso influye en la jugabilidad del título) residen en las sensacionales físicas implementadas a los zombis. En Resident Evil 3, el daño que efectuemos con nuestras armas a las diferentes criaturas tendrá un efecto directo sobre ella, ya sea deformándole la cara, desmembrando una de sus extremidades, etc. Estos mismos elementos se encontraban ya presentes también en el anterior remake pero, en esta tercera entrega numerada, la interacción de nuestras balas con la carne putrefacta de los zombies es mucho menor. Aunque sigue siendo impactante por su violencia, Resident Evil 3 es mucho menos grotesco y gore que su predecesor.

En resumen, Resident Evil 3 sigue impactando a nivel visual tanto o mas que lo que pudimos disfrutar en Resident Evil 2. Hay momentos en que el motor RE Engine supera con creces lo visto el año pasado en la nueva visión del título protagonizado por Leon y Claire gracias a las secciones de ciudad, apocalípticamente representadas de forma sobresaliente. Pese a ello, la reutilización de bastantes elementos el Resident Evil 2 Remake junto con la inexplicable ausencia de secciones míticas del título original nos da la sensación de estar ante un producto bien elaborado pero lanzado con cierta prisa…quizá dado por la cercana muerte de las consolas actuales.

 

JUGABILIDAD

Como hemos comentado un poco más atrás, el cambio en el apartado gráfico obliga a cambiar la jugabilidad (en lo que respecta al manejo de nuestros protagonistas) a una adaptación de lo ya visto en Resident Evil 4 o en el ya mencionado remake del 2 con alguna novedad para la ocasión.

La cámara al hombro en tercera persona nos permite una mayor visibilidad y libertad sumada a la posibilidad de mover la cámara a nuestro placer como ya pudimos ver por primera vez en Resident Evil 2. Del mismo modo, el apuntado del arma deja de ser automático y en tres direcciones determinadas como antaño, pudiendo apuntar a las diferentes partes del cuerpo de los zombis, lo cual estará relacionado con elementos que mencionaremos un poco más adelante.

Pese al cambio a nivel técnico y irremediables cambios en su jugabilidad, Resident Evil 3 mantiene muchos de los elementos jugables aparecidos en el título original, encontrándonos con diferentes cerraduras, candados, pasadizos y demás que deberemos abrir o romper resolviendo ya sea una serie de puzles o haciendo uso de llaves determinadas o una cizalla. Por supuesto, elementos famosos en la saga como las hierbas o los Sprays de curación siguen manteniéndose en esta nueva revisión del título.

Con respecto a los puzles, en esta nueva revisión Capcom se ha dejado olvidado un gran número de ellos por el camino, dejando un tanto de lado el importante componente de exploración para centrarse en una acción más lineal.

Las armas cobran un papel crucial para sobrevivir en Racoon City aunque no siempre serán la solución a todos nuestros problemas...y es que si hay algo que difiere y mucho esta nueva reinvención con respecto al juego original es sin duda la constante sensación de desprotección que sentimos en todo momento durante la partida. Además de que la munición es mucho más escasa, (sobre todo en el niveles de dificultad Hardcore) los zombis son especialmente resistentes a nuestros impactos. Da igual que descerrajemos un cargador contra su inerte cuerpo que, a no ser que consigamos volarle la tapa de los sesos, los enemigos siempre se levantarán. Es en este detalle donde cobran importancia las físicas implementadas para la ocasión ya que, tenemos la opción de disparar a las piernas para hacerles caer al suelo a los enemigos cuando nos vemos apurados (e incluso volarle las piernas para obligar al zombi de turno a tener que arrastrarse hacia nosotros) para aprovechar así y salir como alma que lleva el diablo a una zona segura.

Esta sensación de invencibilidad del enemigo especialmente marcada por la persecución continua del inmortal Némesis, genera un desasosiego y una tensión que, sumada a la escasa munición que tendremos constantemente, consiguen transmitir la esencia del terror de los juegos clásicos que dieron a conocer al género de los Survival Horror, dejando de lado los sustos fáciles y previsibles (que también los hay...aunque en menor medida que los juegos de género más modernos y populares entre los jóvenes).

Del mismo modo que pudimos ver con el remake de la segunda entrega, en Resident Evil 3 volveremos a enfrentarnos a cara de perro ante los zombis si somos asaltados por ellos. A diferencia q en el mencionado título, en esta ocasión dichas animaciones no variarán en función de si portamos el cuchillo o una granada, basándose simplemente en una cinemática reciclada en donde deberemos aporrear un botón para no perder vida.

Además de los clásicos zombies, reaparecen otras criaturas ya conocidas como los Lickers, Hunters e incluso nuevas abominaciones infectadas q no dudarán ni un segundo en acabar con nosotros cuando nos tengan a tiro. Si hablamos de diferentes tipos de enemigos es imposible no hablar de Némesis, el nuevo Tyran infectado por un parásito que lo convierte en un monstruo imparable capaz de regenerar constantemente sus heridas y que irá tras nosotros desde el principio hasta el final del juego.

Esta criatura controlada por Umbrella no cesará en su empeño de aparecer en cualquier momento de la partida aunque, a diferencia del juego original, sus apariciones son más escasas y hasta cierto punto intimidantes ya que, dado el corte cinematográfico de esta reimaginación, se basan en persecuciones un tanto scriptadas en donde solo tendremos q correr hacia adelante para escapar con vida. Solo se consideran auténticos encuentros con Némesis las diferentes ocasiones dentro del juego en las q tendremos q enfrentarnos directamente contra él hasta “derrotarlo”.

De esta forma, Némesis se convierte en un buen “Boss de fase”, pero pierde el carisma y la sensación de peligro constante del juego original en donde si teníamos más alternativas que no fuesen solo huir de su amenaza.

En estas batallas contra Némesis y el resto de zombies, nos resultará especialmente útil la única mecánica novedosa añadida para la ocasión…y es que a medida que corremos, podremos realizar una esquiva para evadir los agarres y los ataques enemigos. Al inicio nos costará pillarle el timming al movimiento pero una vez dominado y si conseguimos una esquiva perfecta, conseguiremos ralentizar el tiempo a modo de “Tiempo Bala” que nos será muy útil para apuntar a los puntos débiles el rival y descargar nuestros cargadores sobre ellos.

Por último queremos destacar una importante diferencia con respecto al original que puede no satisfacer a los fans más puristas...y es que si hay algo que también nos hacia sudar la gota gorda de niños era la necesidad de salvar la partida usando diferentes cintas de tinta para la ya clásica maquina de escribir que sirve a modo de punto de guardado. En Resident Evil 3 la dificultad a la hora de salvar la partida ha desaparecido casi por completo tanto en el modo Asistido como en el modo Normal de dificultad, no teniendo que emplear dichas cintas y por ende, no tener un número limitado de guardados hasta que volviésemos a encontrar alguna. Además, en diferentes secciones del juego, poco antes de alguna secuencia importante o relevante para la historia, el título realiza un autoguardado automático que nos permitiría continuar por dicha parte en caso de morir sin tener que salvar manualmente la partida.

Y es que a un título continuista con su anterior remake, solo se le puede echar en cara la escasa dificultad en su modo normal, siendo aconsejable jugarlo en el modo Hardcore desde el inicio si se quiere vivir un auténtico desafío. La falta de innovar para sorprender también está presente, siendo una fiel réplica a lo que ya vimos el año pasado pero sin arriesgar lo más mínimo para sorprendernos como ya hicieron con Resident Evil 2.

No podemos acabar este apartado con el curioso añadido que Capcom nos ofrece junto a Resident Evil 3. Y es que aunque originalmente estaba concebido como juego independiente, Resident Evil Resistance, la nueva propuesta exclusiva para disfrutar online junto a los amigos, viene incluido dentro del disco.

En este "modo de juego" hasta cinco jugadores combatiremos codo con codo en un grupo de cuatro enfrentándonos a una serie de zombis y criaturas que un quinto jugador a modo de "jefe vigilante" nos irá lanzando durante nuestro camino hasta el punto de salida vigilamdo a través de una serie de cámaras. A medida que la partida avance, el "jefe" podrá llegar a incorporar al escenario incluso al conocido Tyran de Resident Evil 2 para añadirle un poco más de dificultad al desafío.

Esta propuesta de juego funciona bien y es entretenida. Cada jugador posee su armamento específico que podremos mejorar y modificar a medida que jugamos partidas y ganamos experiencia. Una propuesta diferente en el género que prolongará las horas de juego a un ya de por si corto título que supone Resident Evil 3. Pese a ello, y tras unas partidas, el juego puede hacerse algo repetitivo y la supervivencia del mismo dependerá en gran parte a que los jugadores que compren el juego, decidan dedicarle tiempo a este modo pese a no ser su gran atractivo.

 

SONIDO

Si hay algo que destaca también de manera sobresaliente es el genial efecto binaural que Capcom ha implementado en Resident Evil 3, lo cual hace que sea casi obligatorio jugar con un buen equipo de sonido o auriculares de sonido envolvente para notar el más mínimo ruido que pueda significar peligro a nuestro alrededor.

El apartado sonoro es un punto vital a reseñar dentro de todo Survival Horror, ya que la importancia del sonido, los efectos de música y ambientales nos sumergen en la atmósfera de tensión y terror propia del género. Capcom en este remake ha decidido dar un giro importante, apostando especialmente por sonidos ambientes y los típicos sonidos guturales de los no-vivos en pro de la música ambiental la cual, pasa casi desapercibida.

La ausencia de composiciones destacables puede ser una pescadilla que se muerde la cola, ya que si bien es cierto que el silencio añade más tensión y realismo a la situación que afrontan los protagonistas, un poco de banda sonora más allá de los momentos de tensión puntuales amenaría un tanto las horas de juego. Por último cabe señalar que el título nos llega completamente localizado al castellano con un doblaje sensacional.

 

CONCLUSION

Si Capcom ya cerró un 2019 como una de las desarrolladoras del año, este 2020 arranca de manera sobresaliente con un remake sobresaliente pero que a diferencia de su predecesor, no arriesga para sorprendernos como hicieron con Resident Evil 2. A nivel técnico, Resident Evil 3 es un auténtica delicia. La atmósfera está conseguida a la perfección, recreando escenarios conocidos por los jugadores que jugaron al juego original a la perfección y dándoles vida en un entorno 3D cargado de detalles pese a las importantes ausencias de escenarios míticos.

Las secuencias de movimiento (especialmente las faciales) y los modelados de los personajes y los diferentes zombies poseen unas físicas reutilizadas e incluso recortadas en comparación con el anterior título A estas físicas ha que añadirle una IA mas que decente.

La jugabilidad clásica, dado el lavado de cara a nivel técnico, desaparece por completo, estando frente a un título que recupera las geniales mecánicas de movimiento y apuntado de los Resident Evil modernos. A excepción de esto, los puzles y los elementos que hicieron grande a la franquicia se mantienen aunque en menor número y trascendencia, reinterpretando en este sentido a la obra original convirtiéndolo en un juego más lineal y centrado en la acción.

Con Resident Evil 2, Capcom marcó un antes y un después de lo que significa la palabra Remake...convirtiendo a este en un espejo al que todas las desarrolladoras deberían mirar a la hora de realizar futuros remakes de otros títulos clásicos. En Resident Evil 3 ha proseguido con su estela, pero si somos justos, le ha faltado un tanto de ambición en esta ocasión para trasladar más fielmente la trama original y sorprender (si es que aún es posible) un poco más a los jugadores y fans de la franquicia que vienen de disfrutar de la obra maestra que nos regalaron el pasado año.

 

NOTA: 8.5