Codemasters anuncia Toybox Turbos

Codemasters ha anunciado hoy Toybox Turbos,  un juego de carreras de inconfundible aroma retro que estará disponible el próximo 12 de noviembre para Windows PC en Steam por solo €14.99 y que llegará también muy pronto al Bazar de Xbox para Xbox 360 y a PlayStation Store para PLAYSTATION 3.

Con una jugabilidad inmediatamente reconocible para aquellos que recuerdan los aňorados juegos de coches “miniaturizados” de Codemasters de los aňos 90, Toybox Turbos proporciona un espectáculo de carreras arcade sin precedentes.  El jugador se embarca en un nostálgico viaje de 18 obstáculos y circuitos repletos de atajos inspirados en evocadores lugares de la infancia en el que tendrá que acelerar sobre una mesa de cocina toda pringosa de mermelada o esquivar el fuego de los quemadores, por ejemplo, mientras envía a sus rivales de vuelta al cole y vuela sobre los raíles del tren eléctrico, entre otras muchas hazaňas.

Repleto del encanto y diversión de las carreras retro, Toybox Turbos incluye opciones multijugador para cuatro jugadores en red local u online, perfectas para convertir a  los colegas en enemigos acérrimos en sesiones de juego que no podrás detener. Ya sea en juego local u online, o ambos, con Toybox Turbos cobran vida los gloriosos días de los marcadores de las competiciones multijugador a base de rapidísimos turnos.

Toybox Turbos cuenta con 35 vehículos para recoger y personalizar, desde coches deportivos y dragsters a vehículos de emergencia, taxis, furgonetas de helados, vehículos de construcción o vehículos lunares, entre otros muchos. Cada uno puede ser pilotado en seis  turbomodos de juego; el jugador esprinta hasta la meta en las  Carreras Clásicas, establece su mejor tiempo en la Contrarreloj, adelanta a cuanto turbojuguete se le pone a mano en Adelantamiento, evita ser barrido por la marea en Escape, gana al reloj en Cuenta Atrás y elimina jefes en el modo Eliminación. Para obtener ventaja, los jugadores pueden recoger y utilizar una variedad de power-ups diseminados generosamente por los circuitos, como ametralladoras, minas, pulsos electromagnéticos y, por supuesto, ¡martillos gigantes!